Cuando te Busco, No te Encuentro


Hermanos... la paciencia es la madre de la ciencia y también la Paz en la Conciencia.

Por Ramón Bello Cuadros (Ra.) para ti.

Nuestras vidas son un viaje, conocemos el punto de salida y la forma de llegada.

A veces si, sabemos que hemos recorrido algo del camino y conocemos mas o menos donde nos encontramos, lo que no sabemos es que existen otras posibilidades, otras alternativas, otras vías, otros medios.

Pues uno solo puede conocer aquello que ha aprendido, lo que ha aprendido en su propio conocimiento.

Y a veces no se puede aspirar a más, a no ser que pongas en funcionamiento tu intención de conocer otras vías, otras alternativas que están esperando a que te intereses por ellas, es lo mismo que en física cuántica y experimentalmente pones atención a un fotón que se presenta como onda o como energía, así es la dualidad humana.

Es lo mismo que el que camina a pié, ¿sabe que existen caballos, carretas, automóviles, aviones, naves, y las posibilidades intangibles e infinitas del espíritu, del Alma?

Si vas a pié, sin referencias, y desconoces la luminosidad del Sol, entonces tu caminar es lento, húmedo, frío, hosco, oscuro, nocturno. El bosque te rodea y las ramas te lastiman, tus pies descalzos resbalan en el musgo y tropiezan con las piedras te dejan dolorido, no tienes ni senda ni sendero, haces solo un hueco con tu cuerpo entre arbustos y solo te guía una tosca madera impregnada de resina que antorcha al arder apenas desdibuja sombras con los trazos de su luz que tus pupilas casi alcanzan a definir como algo conocido.

Los jirones de los harapos con que cubres tu cuerpo apenas te resguardan y el frío húmedo de la espesa niebla te empapa. Los mechones de tu cabello que acaban donde con la tersura de tu joven piel se inicia tu frente, rezuman agua que a gotas se desliza por tus cejas, resbala hasta tus ojos y entrecierra tus párpados.

Tu caminar se encuentra animado por el recuerdo de una guarida, de una lúgubre choza en la que aterido y sin fuerzas encontraste refugio, calor de hogar, cobijo y descanso, pero tu noche es larga, tu camino pesaroso, tu antorcha rústica y vagas sin rumbo anhelando una nueva cobija que te cubra tus simples carencias, no pides más porque lo desconoces todo.

Así vas caminando en busca de la sinrazón de tu vida, así caminas buscando un simple soporte, a veces hasta una cueva te satisfaría con tal de hallar descanso y alivio al desgarro que te anima a buscar sin rumbo y así, tú buscas el Amor en la oscuridad del corazón de tus sentidos, donde a veces se encuentra ese bosque.

Cuando tienes la intuición y sabes que puedes dejar tus penas y amarguras de lado para desarrollar tus sentidos, es el momento en que cambias de imagen y te ubicas en un entorno más placentero, pues tu conocimiento sabe como iluminar inquietudes, ahora hoyas sendas y caminos, tus pies calzados, tus pertenencias a la espalda te aportan seguridad, impermeables para las inclemencias, tienda de campaña para el cobijo, linternas para alumbrarte, comida y medicinas, ropa seca y calzado bueno, aún sigues anhelando encontrar cataplasmas que mitiguen tus anhelos de Amor mientras sigues caminando con brújula, pero sin rumbo.

Esa es tu búsqueda del Amor, deseas y anhelas un Amor que se complemente en ti, que te ayude, que te apoye, que te descubra, un Amor tan ciego que te permita ver a través de ojos ajenos.

Pero solo sé consciente de que:

El Amor no se busca, El Amor se encuentra, y se encuentra precisamente cuando ya no lo buscas.

El Amor es tu Origen primigenio, es tu horizonte final, es tu meta y tu destino.

No estás aquí por El, estás aquí “para El”

Cuando teniendo todos los accesorios inimaginables te sientas al borde de la carretera en confiado abandono y decides caminar solo para conocerte y amarte, amando la vida, amando los actos, amando tus gestos, amando tus sentidos y amando lo que ellos traducen para ti, AMANDO, SIMPLEMENTE AMANDO, es cuando Él, se apresta para entrar en escena, será el preludio de sentir Amor.

Cuando amas tus acciones, cuando agradecido amas el aire que al henchir tus pulmones llena tus alvéolos de oxígeno, cuando gratificado por la luz y el calor que reconoce tu piel, agradeces al Sol la energía que te brinda, agradecido en proporcionar a tu sed el frescor del agua que humedece y apacigua la sequedad de tus labios, las sequedades de tu boca y que llena tus ansias con su revitalizante efecto.

Agradecer es el principio del encontrar sin buscar, pues el Amor no te busca, no es un camino ni una meta.

EL AMOR SOLO ES ÉL.

Y cuando uno sabe que en su propia Divinidad, Él dota a toda criatura con las todas y cada una, con las mismas posibilidades a todos, es entonces cuando uno hace de su capa un sayo y se devana los sesos discerniendo y razonando, leyendo e interpretando hasta... darse cuenta de los árboles del propio bosque no permiten que vea toda la extensidad de Su Ilimitado Ser, porque precisamente se encuentra en ti mientras lo buscas fuera.

Seré más concreto y más conciso.

Antes de llenarte de Amor para ofrecerlo, regarlo, sembrarlo y derrocharlo, has de vaciarte de todos tus temores y todos tus embargos, has de vaciarte de miedos y preocupaciones, de insatisfacciones y deseos de poseer, siendo simple y compartiendo y departiendo de forma natural con aquellos a quienes la vida ha puesto a tu lado.

Cuando te hayas vaciado de forma consciente es cuando te podrás llenar con el Amor que todo lo tiene y todo lo da.

Cuanto te va a durar esto... Recordándote la vieja fábula del caminante a Atenas, “simplemente camina”; pues cuando inicies ya estas llegando, mientras... solo sueñas con iniciar El Camino.

Ya no puedes ver con los ojos del viejo amor a los que te proporcionaron satisfacciones y placeres materiales.

Unos por traición, desinterés y desilusión, otros porque consideras que un agua pasada no mueve tu molino o que ya no tiene posibilidades de hacerlo y de esta manera te niegas al negar.

Parece ser que alguien, con mucho acierto dijo... (no beberás agua dos veces en el mismo río) pero solo piensa en la frase, en su concepto, en su contexto, en su temporalidad e intégrala en ti.

Mirando con los mismos ojos los mismos paisajes, interpretando con los mismos pensamientos las mismas preguntas... se llega siempre a las mismas conclusiones ¿verdad?

Yo me explico pero a veces tu no captas el profundo significado de mi mensaje.

Como Ave Fénix, renacerás de tus viejas cenizas a una vida nueva, que será comprensión, Amor, aceptación, dicha y Gloria.

No los puedes ver ahora con los ojos del Amor, porque cuando derroches Amor a tu alrededor todo será Amor y es entonces cuando sentirás El Amor, mientras no lo realices con la superior intención puesta en ello, solo serán viejas y sabidas complacencias con nuevas caras y nuevas aspiraciones de futuros ya conocidos.

Hoy están a la orden del día vacíos, nudos, pre-gastritis que notas en tu estomago, son ansiedades que pugnan por liberarse de ti haciendo el camino lógico de una digestión que te avisa que las cosas del espíritu no se digieren como las cosas del cuerpo, pero que si que puede integrarse en ti si lo aceptas como hijo de tu propio desconocimiento.

No quieras comprender ni entender las cosas que han acontecido en tu vida con la lógica de tus pensamientos, pues nuestras capacidades siempre nos limitan. Obsérvalos con los ojos del Alma. Ámalos como verdaderas fuentes de conocimiento y enriquecimiento que hacen que sorprendido te percates que existen unos caminos que no dañan ni oscurecen, sino que curan y enriquecen a la vez que dan Luz.

Acepta y ama las cosas que te han pasado tal y como han sido hasta ahora y dispón lo necesario para aceptar que la vida te sorprenda mientras trabajas para ti.

No te obceques en querer dirigir los cambios que puedes obtener y observar si miras con los ojos del Alma, solo sumérgete en la gratitud y el Amor, empieza a comprender que no sabes, porque nadie te ha enseñado, pero que hace milenios que el Ser Humano que despierta a ello, es un Ser Humano, que crece y hace crecer a los que tiene al lado, de esta manera nos damos la mano y nos ayudamos.

Empecemos de otra manera y por lo simple.

Si prefieres orar, rezar, pedir, implorar, hazlo. Pide a quien tu creas más elevado que tu, a Dios, a Cristo, al Universo, a tus Guías, a la Madre Tierra, Al Sol, a quien quieras, pero ruega y pide que te den Amor simple y Puro para derrochar en tus actos y acciones.

Cuando puedas y tengas oportunidad, camina con los pies descalzos por encima de la hierba, con la intención de liberarte de energías que te frenan y a la vez llenándote de Amor, siempre la intención ha de estar presente, llenarte de ese Amor tan necesario que quieres empezar a usar.

Cuando te dirijas a los demás, sé claro, concreto y conciso, detalla lo que dices e informa lo suficiente para ser entendido y aceptado en lo que muestras, concéntrate solo en ello y da Amor a través de tus acciones, reparte indiscriminadamente Amor a todo lo que ves, desde la persona con quien hablas a las mesas y sillas, pasando por las paredes y ventanas, a todo lo animado o inanimado que percibes. Esta es una forma básica de comenzar a armonizarte.

¡Es gratis y solo requiere de tu pensamiento intencionado!

Cuando te encuentres caminando por la calle, sujeta fuerte tu cartera y no lleves cosas importantes en ella, camina seguro y sin pegarte a los edificios, tampoco demasiado cerca del borde de la acera, pero concéntrate en el acto de caminar y en cada acto que eres consciente que realizas, no te cuelgues de tus recuerdos ni le des vueltas a lo que no ha sido, ni porqué no ha sido y reparte Amor con el pensamiento y con el sentimiento en el ahora, aléjate de situaciones problemáticas y no te metas en líos, sé consciente de ti y vive el momento, ese momento que pasa y que con cada latido de tu corazón ya ha pasado mientras esperas y confías en el regalo del siguiente.

Cuando te transportes, sujeta tus pertenencias y mira tranquila y confiadamente los rostros de las personas que tienes alrededor, ello te avisará de muchas cosas, pero concéntrate en lo que eres, en lo que tienes y como tus sentidos te proporcionan información, mira de entregar Amor mentalmente al conductor y a aquellos que tu creas necesitados, solo de eso.

Cuando te encuentres en tu casa, dedica un tiempo a los que te aman y requieren de ti, ámalos en tus actos, en tus gestos, en tus palabras en tu mirada y en su contemplación, no les concedas un tiempo excesivo ni les prives de sus rutinas y quehaceres, pero si el suficiente, vuelve a ser consciente de ti, concéntrate en ti, evádete de las noticias luctuosas, políticas desastrosas y sucesos trágicos, no observes anuncios comerciales ni propaganda de ninguna clase, gratifica tus sentidos y eleva tu Espíritu con tus actos.

Todo tiene su función y si te indico que lo más oportuno para ti en estos momentos es comenzar por algún sitio, esto que antecede una es una forma de comenzar.

Todavía no puedes imaginar las ayudas que tienes, pero recuerda que tienes que ser tu quien inicie un pequeño cambio en tu propia vida y en ese drama que representas.

Imagina lo que significa una simple declinación de medio grado en un trayecto de 24.000 kms, no te estoy pidiendo imposibles, solo que seas consciente de que existen otras realidades y muchas posibilidades para ti, con el solo conocimiento que expongo.

Ya se que tienes prisa.

Ya se que no haces uso de tu propia paciencia.

Recuerda solamente que cuanto mas tardes en plantar, más tardarás en cosechar.

Pasito a pasito, sin prisa pero sin pausa.

¿Cuántos amores puedes tener antes de que te llegue el deseado?

¿Cuántas pruebas químicas realizarás antes de dar con la formula que te satisfaga?

La transmutación no es una prueba química, la Alquimia, es la química del Alma y tú has de ser el Aprendiz de Brujo.

Aún no sabes en que fuerzas te dirigen tus corrientes.

Toma siempre tu tiempo, habla con tranquilidad, goza de lo que comunicas, haz cómplice a tu Ser elevado, pues ese terreno baldío hay que liberarlo, limpiarlo, abonarlo, oxigenarlo, removerlo, prepararlo para la siembra, sembrarlo, cuidarlo, mimarlo, regarlo, volver a sacar las malas hierbas, ayudar a crecer los brotes, guiarlo, sulfatarlo, volver a regarlo y tantas y tantas cosas antes de empezar a ver los botones que se convertirán en frutos, que mas tarde deleitaran y despertarán tus gozos.

Un abrazo hermanos.

Por Ramón Bello Cuadros (Ra.) 23/02/2012