James Redfield, autor de ‘La duodécima revelación’



James Redfield (Alabama, 1950) ha conseguido millones de lectores en todo el mundo gracias a su primer libro, Las nueve revelaciones, donde ya daba las claves para emprender el camino de la espiritualidad lejos del caos que vivimos en el mundo: atender a las señales que da la vida, hacer caso de nuestra intuición, abrir la mente y, desde el interior de cada uno, formar parte de un movimiento que busca la verdad y la felicidad de una manera diferente. Tras publicar La décima revelación y La undécima revelación ahora presenta La duodécima revelación , donde busca ofrecer al lector el “conocimiento pleno” para decantarse por el camino de la espiritualidad.


“Este mundo corrupto nos llevará al colapso y el camino espiritual nos da la solución para evitarlo”


¿Después del éxito de sus libros, recuerda cuál era su objetivo cuando escribió Las nueve revelaciones?

Sí. Yo trabajaba de terapeuta y vi que había un renacimiento espiritual en el mundo; no era algo que tuviera que ver con la religión, sino simplemente una experiencia espiritual. Mi objetivo era describir esas experiencias que tanta gente estaba teniendo al mismo tiempo.

¿Y cree que ha conseguido algo con sus libros?

Sí, este es el cuarto que escribo. Cada uno es una crónica que explica ese desarrollo personal de la experiencia espiritual que está teniendo lugar en el mundo. La duocédima revelación describe el conocimiento pleno que podemos llegar a tener las personas para conseguirlo.

¿Cree que las excelentes ventas de sus libros le han supuesto ganar seguidores o simplemente lectores?

Creo que han sido útiles a las personas, porque han aclarado esa intuición personal que cada uno tiene en su interior. Yo no soy un gurú ni voy de líder de ningún movimiento, simplemente escribo libros que ayudan a los lectores que ya estaban en ese proceso de experimentación o bien quieren empezarlo.

¿Y en estos años no ha tenido la tentación de tirar la toalla?

No, básicamente el mundo corrupto y caótico en el que vivimos demuestra que el camino no espiritual no es el que hay que seguir. Podemos descubrir por nosotros mismos que ese camino espiritual puede ayudar a solucionar nuestros problemas y nos aporta formas para reformar este mundo en el que vivimos.

¿Cuál es el mayor reto: que las personas crean en ese camino o que decidan no abandonarlo?

Lo importante es la persistencia y descubrir esa guía espiritual. La clave que nos permite llegar a esa experiencia está en seguir las intuiciones que nos guían por el camino de la espiritualidad. Si sigues las intuiciones, llegarás a la felicidad plena.

Veo que su libro es un tanto pesimista en cuanto al mundo. Leyéndolo parece que estemos al borde del abismo. ¿Tan mal estamos?

Nos enfrentamos a problemas cruciales. Es como la contraposición de dos fuerzas: la de aquellos que luchan por el camino espiritual y la de quienes quieren que el mundo siga siendo el lugar caótico que conocemos. Pero si hay un número suficiente de personas que deciden seguir el camino de la espiritualidad, podrán vencer a la fuerza opuesta a ese camino.

¿No siente que va usted a contracorriente? Lo digo porque en esta época de crisis, parece que parte de la sociedad tiende a los extremos…

El número de extremistas en el mundo es muy reducido en comparación con los que no lo son, por lo que la mayoría es más poderosa que la minoría, sobre todo si tienen ese poder espiritual, que es lo que se está produciendo ahora. Pero cada persona tiene que escoger el camino de la integridad y de la aventura espiritual para que esa sea la norma en el mundo. Todos tenemos telepatía entre nosotros y nuestra forma de vivir hace que los demás entren a formar parte de ese modo de vida. Igual que la corrupción y el engaño son contagiosos, el camino de la espiritualidad es todavía más contagioso. Nuestro cerebro y nuestras almas están diseñados para seguir este camino en la vida. Si muchas personas viven de este modo, se establece una conexión que va creciendo. En este sentido, soy optimista, pero cada persona tiene que decantarse en qué lado quiere estar. Este es el mensaje del nuevo libro.


¿Pero cómo decantarse por el lado positivo en un momento en que la corrupción y el engaño parece que vienen de la política y de las instituciones?

Es un proceso individual. En los momentos en que nos sentimos solos y desatendidos es cuando hay que establecer las bases para ese camino. Es la única manera de hacer frente a un mundo corrupto. La corrupción nos llevará a un colapso y el camino espiritual nos da las intuiciones para saber que si sospechamos que vamos a perder el trabajo, entonces no tenemos que esperar a que eso ocurra, sino que debemos empezar a buscar otro empleo.


En España estamos viviendo una ola de protestas que han nacido en las redes sociales. ¿Cree que ese despertar espiritual también puede tener su origen ahí?

Sí, ese es también el mensaje del libro: el poder de la influencia colectiva, que se intensifica a través de los grupos y las redes sociales. El proceso es individual, pero podemos aprovechar las redes sociales para ponernos en contacto con otras personas que sienten lo mismo.


En su libro, el protagonista dice que su mayor maldición es encontrarse con un escéptico. ¿Cuál es la suya?


La actitud que nos limita, que nos pone barreras, es pensar que otras personas son nuestros enemigos, ya sea porque son de otras religiones o de otras ideas políticas. Pero hay que pensar que todas las personas tienen alma, también ego, y que todos nos podemos equivocar. En cambio, nunca hay que considerar a nadie como un enemigo, sino hablar directamente al alma de los demás. Creer que alguien es un enemigo supone aumentar la corrupción del mundo.


¿Pero usted cree que es posible luchar contra el escepticismo en el siglo XXI?


¡Yo soy el vivo ejemplo, lucho cada día! En el fondo, todos somos escépticos, pero sólo hasta que encontramos la experiencia correcta que nos conecta con esa verdad que perseguimos.

Manel Haro. Barcelona 

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SINOPSIS

Las nueve revelaciones es una película realizada en 2006 basada en la novela del mismo título escrita por James Redfield en 1993. Relata la historia de un hombre al que el azar o el destino dirigen a la selva tropical de Perú en busca de ciertos pergaminos recientemente descubiertos que poseen valiosas ideas de índole espiritual. Unos investigadores acaban de descubrir estos escritos ancestrales que anuncian la llegada de una nueva etapa para la humanidad que cambiará la percepción sobre todo lo que le envuelve y le proveerá de una nueva realidad de cara al futuro. Por su parte, la iglesia intentará por todos los medios evitar que dichos manuscritos sean encontrados por las repercusiones de su descubrimiento para esta organización criminal (pulse PLAY).





El siguiente es un resúmen de los Nueve Pasos descritos por Redfield en su libro "La Novena Revelación".


1. Una masa crítica :


Tomando conciencia de las coincidencias en nuestra vida
¿Te sientes inquieto? No estás solo: Todos están empezando a buscar más significado en su vida. Pon atención a esas "Coincidencias" - que parecen ser eventos destinados a suceder. Son realmente eventos sincrónicos, y siguiéndolos, entrarás en tu camino de verdad espiritual.

2. Una nueva manera de mirar el mundo

Observa nuestra cultura dentro de su contexto histórico. La primera mitad del pasado milenio se malgastó bajo el pulgar de la iglesia; en la segunda mitad sólo nos preocupamos del bienestar material. Ahora, al fin del Siglo XX, eso ya no nos importa. Estamos listos para descubrir el principal propósito de la vida.

3. Un Universo de energía dinámica

Empieza a conectarte con la energía que envuelve a las cosas. Con práctica, aprenderás a ver el aura alrededor de los seres vivos y aprenderás a proyectar tu propia energía para entregar fuerza.

4. La lucha por el poder 

Competencias por la energía humana.
Una competencia inconsciente por energía es la base de todos los conflictos. Dominando o manipulando a otros, nos da energía extra que pensamos necesitar. Seguro que se siente bien, pero ambas partes resultan dañadas en el conflicto.

5. Conectándose con la energía divina que llevas dentro

La clave para sobreponerse al conflicto en el mundo es la experiencia mística, que es alcanzable para cualquiera. Para nutrir lo místico y construir tu energía, déjate llenar por un sentimiento de amor.

6. Aclarando el camino : Descubriendo tu ruta en la vida

Los traumas de la niñez bloquean nuestra habilidad para experimentar lo místico. Los humanos, a causa de sus cargas, desmbocan en uno de cuatro "dramas de control" : Los Intimidadores roban energía del resto con amenazas. Los Interrogadores la roban juzgando y cuestionando. Los reservados atraen atención (y energía) coqueteando. Y las Víctimas nos hacen sentir culpables y responsables por ellos. Date cuenta de la dinámica familiar que ha creado tu drama de control y concéntrate en la pregunta principal, que es cómo poder hacer de tu vida una vida de un mayor nivel a la que tuvieron tus padres.

7. Conociendo tu misión personal : Fluir

Una vez que hayas aclarado tus traumas, puedes construir energía a través de la contemplación y meditación, concentrándote en el cuestionamiento básico de tu vida, y empezando a hacer caso a las intuiciones, sueños, coincidencias sincrónicas, para llevarte a la dirección de tu propia evolución y transformación.

8. La Etica Interpersonal : Animando a otros

No puedes realizar esa evolución sólo, así es que empieza a practicar la nueva "Etica Interpersonal" animando a quienes crucen tu camino. Habla con gente que espontáneamente haga contacto visual contigo. Evita las relaciones de interdependencia. Pon atención a los dramas de control de otras personas. Cuando estés en grupos, habla cuando el espíritu - en vez del ego - te motiven.

9. Evolucionando a estados superiores

El propósito es evolucionar más allá de este plano. Menos gente y más bosques nos ayudarán a mantener nuestra energía y a acelerar nuestra evolución. La tecnología hará la mayor parte del trabajo por nosotros. A medida que valoramos la espiritualidad más y más, eventualmente reemplazaremos la economía de mercado y nuestra necesidad de un empleo remunerado. Podemos conectarnos con la energía de Dios de una manera que tal, que eventualmente lleguemos a ser seres de luz, que caminen directamente al cielo".